viernes, 12 de septiembre de 2008

Los Ultimos Versos



Sabemos que nuestro pasado
Es ajeno del futuro;
Que ya elegí mi camino,
Y antes, ya habías elegido el tuyo.

Por un momento fuiste mi deidad,
Cuando te miraba a ti y a nadie más;
Pero sabes que a la larga,
Desde lo mas honde emerge la verdad.

Si te quise, no sirve de nada,
Porque te di un amor virgen de engaños;
Mas en tu juego de hacerte el enamorado,
La falsedad era quien reinaba.

Quizás no fue tu culpa,
El confundir tu lujuria con amor;
solo creíste ver ternura
en tu desenfrenada obsesión.

Pero llego el día esperado,
En el que me harte de ti,
Me canse de dar, me canse del llanto;
Hoy quiero volar sin ti, quiero jugar a vivir.

Disculpa si ya no voy con tu demagogia amorosa,
Si ya tus palabras no besan mis oídos;
Si quieres, puedes inventar alguna otra cosa,
pero jamás veras tus labios juntos a los míos.

Tampoco es que pienses que te guardo rencor,
Es simplemente que ya me ganó la fatiga;
Y el fósil de lo que fue mi amor,
Se perdió en el abismo de mi gran herida.

Herida, si lo estuve,
Mientras el amor aun respiraba;
Pero ya es pasado,
Y tus caricias lástima me causan.

jueves, 11 de septiembre de 2008

El Ferrocarril


Si tuviera que realizar una comparación de lo que es una familia, diría que esta se asemeja a un ferrocarril, en el que cada integrante de ella son los vagones que conforman el tren.

Mientras la familia esta unida, el tren marcha en una sola dirección. Sin embargo, cuando los hijos van creciendo el tren comienza a oxidarse y los que ayer fueron pequeños vagones, hoy olvidan los rieles que tantas veces los vieron pasar, buscan sus propios carriles.

Sobre el tren que ayer marchaba con fuerza y vigor, tan solo quedan restos en algún carril olvidado, donde ya nadie los espera llegar; quizás porque no hay moradores en el aquel lugar o porque duele ver desplomado aquel gran ferrocarril.

¿Sera esta la ley de la vida o un decreto que ha promulgado el hombre con sus actos, por no cuidar del tren y por consiguiente dejar que huyan los vagones?

Se que la respuesta la hallare cuando elija mis propios rieles que he recorrer y deje atrás el ferrocarril que hoy me guía…


“Hoy recorro la línea férrea de papá y mamá… mañana, caminaré por los rieles de mi conciencia”

martes, 9 de septiembre de 2008

Tengo tiempo

Tengo tiempo para quererte,
pero los segundos se acaban,
me roban el instante de la proxima caricia
y me devuelven deseos de más;
me gritan que hay más tiempo, que volverás,
pero los segundos se hacen lerdos,
cuando no estás… y me cuesta tanto respirar.

Tengo tiempo para quererte,
Siempre que estés a mi lado
Y cuando te marchas, te quiero aún más;
Aunque el tiemo se lleve con él,
Todo lo que me faltó por hacer,
De lo que tuve ganas… y no pude.

Aguardaré para la siguiente vez,
Le secuestraré al tiempo
Los segundos que me robó, y en ese instante…
Te daré caricias infinitas,
Y fundiremos nuestros labios
En un beso perpetuo.

Tengo tiempo para quererte,
Si este segundo… lo hacemos eterno.
Este poema es una adaptacion de un poema que leí una vez, aca esta el original:
Tengo tiempo para quererte
pero los segundos se acaban
no me da tiempo a decirte
a besarte con sentimientos
a estremecerte con caricias
tengo tiempo para amarte
si este segundo es eterno

lunes, 8 de septiembre de 2008

Mar Adentro



Me invade la ira, esa que es capaz de asfixiar la libertad; una libertad que engrandece al maestro de los sentimientos: el amor. Y esta ira no es más que un celo encubierto, disfrazando aquello que me quema por dentro; la impotencia de un mudo, porque no puedo hablar, aún si tengo los labios abiertos y las palabras precisas para ahogar tu suspiro.


Mi impotencia surge del temor, un temor que se esconde tras el silencio de esta mirada; y mientras te miro, me pierdo en tus ojos, y tu ríes; y escarbas turbias aguas.


Juzgas mi frívola actitud, no sé si por inocente o por inconcecuente, pero mi ira va más de tus motivos elocuentes, de esos que haces alarde, aunque no lleguen a rozar mi instinto.


Cómo llamaremos la obra, siendo tu el mártir y yo, la ideóloga maquiavélica? Acaso... No, te toca a ti penasar un poco (al menos una vez), después de todo, tu eres el héroe en esta historia, y yo soy el papel que has escrito para vanagloriarte.


Si tan sólo buscaras mar adentro; deja el bote en la orilla y naufraga en mí. Visita todos mis recovecos y encontrarás lo que no sabías que perdiste: mi confianza... Ahora que has llegado a este lugar, ahoguemos pues, nuestras almas en sus designios; y demos rumbo a esta travesía mar adentro.


*En colaboración con Julia Díaz

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Hoy Eres Nada



Hoy me duele más que nunca tu presencia,
Porque hoy me falta tanto,
Que me hace saber que hace mucho tiempo,
Que dejaste de estar aquí.

Hoy te conozco más que ayer,
Porque ayer creía en lo que veía a mi lado,
Y hoy recuerdo…
Que la verdad no se muestra a los ojos,
Se desnuda ante la fe de un corazón entregado.

Hoy eres más que ayer,
Porque hoy eres nada;
Ayer fuiste el universo,
Fuiste la verdad,
Pero tuviste que acabar,
No pudiste aguantar;
No aprendí de tu presencia, sabes?
Aprendí de mi soledad.

Me regalaste noches? No.
Me las vendiste;
De verdad te arrepentiste? No.
solo me cobraste.

Pero ya mi cuenta está saldada,
Te pagué con algo menos que nada,
Y eso es el olvido…
Del que jamás juraré haberme arrenpentido.

Puede que mi sinceridad te haga daño,
Preferiría que te destruyera;
Si a tu hipocresía no le importé,
Por qué tendría mi sinceridad que sentir pena?

“Y no deseo que sufras”,
Eso ya es rutina para ti;
Y no creas que estoy haciendo alarde de mi felicidad…
Eres tan poca cosa,
Que esa palabra jamás entenderás.


Nelsi E. Díaz B.
José R. Zapata C.