No quisiera robarte el aire,
me gustaría poder afrecertelo yo,
y así, tan solo seas deudor de mí,
nisiquiera de la naturaleza que nos rodea.
Quisiera fantasear y decir que fuí la primera,
que tus labios solo conocen el sabor de mi saliba,
que tus manos son virgen de otro cuerpo.
No, no es así...
y no naciste en el primer TE AMO de mis labios,
pero tampoco lo hice yo,
aunque a veces lo crea así,
aunque tú, a diferencia de mí,
no me reclames por ello.
Talvez sea que yo te amo más,
o quizá, te he subestimado
y tu seas más senzato
de lo que suelo decir que soy.
Pero... y qué???
si el amor reina en la locura
y la madurez lo atropeya.
Por eso somos una pareja;
para llenar las faltas,
cubrir las carencias,
regalarnos miradas
dibujar las alegrías
y vivir tristezas.
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